Al principio pensé que yo realmente te importaba, pero hoy me doy cuenta que no era así.
Quizá la soledad de ese momento, hizo de mi de alguien a quien no podías ignorar, sin embargo, ahora que tienes tantas amistades, la nuestra ha pasado a un segundo o quizás tercer plano.
A pesar de todo, a pesar de tal posible ingratitud me encuentro aquí presente con toda la disposición de poderte ayudar, de no dejarte solo y seguir a tu lado pase lo que pase.
Recuerda que aún existo y que aún me considero parte de tu vida, y aunque este momento veas que me vengo abajo, no hay reproches ni nada que echar en cara.
No hay comentarios:
Publicar un comentario